Desencadeno de mi pecho los cuervos,
Azules como viento del sur.
Dejé encerrado un gusano en un vaso,
Puse hojas, tabaco y un dedal...
Son más de siete sillas las que hoy están vacías,
Y se hace tarde en el hospital.
Observo risas, zapatos y los murmullos capitales son asco y tontería.
Los párpados pesan como culpa de Lunes,
Los dedos se acomodan en el cuello
Y ya no soy tan fuerte.
Ya no soy tan fuerte.
Lo morboso y lo grotesco ya no es gracioso,
Son clavos oxidados que calan profundo en el intelecto.
Risa, Risa, Risa Risa, Risa.
Fantasmas de verde con bolso negro.
Putas de colores con carteras de invierno.
Un primer plano para tus labios, atrás un edificio de espejos,
Se refleja otro edificio, un albi celeste cielo,
Otros ojos en el fondo... Corten.
No tenemos que ver con nada... Y aparece otro fantasma verde,
Con bata blanca y bolso negro.
La carne y los huesos aman que cruces tus piernas.
La luz y el agua aman que dejes tu cabello suelto.
Todos odiamos a las engreídas, así que quítate el
Maquillaje, desnúdate, desencadena los colibríes de tu pecho,
Blancos como lluvia del sur.
Fantasmas, muecas, teorías y llanto.
Fantasmas, muecas, hipótesis y gemidos.
Fantasmas, muecas, práctica y consuelo.
Hola, ¿como estás?
No hay comentarios:
Publicar un comentario